Qué ganas de abrazarte fuerte, de sentir tu corazón latiendo junto al mío...
Sos tanto para mí... Tanto, tanto!
Te amo.
Yo era un objeto esperando a ser ceniza,
un día decidí hacerle caso a la brisa,
a irme resbalando detrás de tu camisa,
no me convenció nadie, me convenció tu sonrisa...
...Dame la mano y vamos a darle la vuelta al mundo...